/ Vuelta a clases: protección de datos de menores en los colegios

La pandemia del Coronavirus conlleva un gran desafío para los colegios. Nuevos protocolos y medidas sanitarias han obligado a los establecimientos a solicitar datos personales de sus alumnos. ¿Está preparado su establecimiento para proteger estos datos?

Santiago Ortúzar
Socio Alessandri

Debido a la pandemia los colegios debieron adoptar rápidamente soluciones que les permitieran seguir funcionando. Plataformas online, sesiones sincrónicas a través de aplicaciones de video conferencias, entre otras, buscan facilitar la comunicación entre el establecimiento, alumnos y apoderados.

A los estudiantes les crearon usuarios, claves de acceso y casillas de correo electrónico, a lo que se suma el esfuerzo de distintos establecimientos que desean una mejor identificación de sus alumnos, sus dolencias y movimientos. Esto implica, por ejemplo, control y registro de temperatura, catastro de niños con enfermedades crónicas, seguimiento y trazabilidad de contagiados y de contactos estrechos. Todos estos son datos personales, y por involucrar menores de edad, tienen carácter sensible.

La ley vigente que protege los datos personales no es solo obligación de las grandes empresas ni de aquellos que hacen negocios de la captación de estos datos. También se aplica al correcto tratamiento de los datos personales de los alumnos. Es probable que muchos establecimientos no la estén aplicando o ni siquiera tengan consciencia del problema.

El mismo Mineduc ha establecido dentro de su política de privacidad (https://www.ayudamineduc.cl/politica-de-privacidad) que son datos sensibles, entre otros y más allá de los datos de los menores per se, aquellos que se relacionan con los estados de salud físicos y psíquico y aquellos relacionados con las necesidades especiales, con lo que se establece una pauta que debe seguir todos los colegios en su tratamiento de este tipo de información.

Terminada la urgencia de la pandemia, aparece otro tema muy relevante y que tiene que ver con el cuidado de los datos personales. Una buena política de captación y procesamiento de datos es una herramienta eficaz no solo para combatir la pandemia, pues su utilidad se extiende más allá de la salud cuando los colegios decidan que tienen un instrumento eficaz que les permite lograr otros objetivos.

Sin importar la finalidad, es importante que un colegio demuestre que su preocupación por sus alumnos no es solamente física y mental, sino que se extiende a todos sus derechos. Recordemos que la Constitución protege el derecho a la vida privada, la honra de la persona y la protección de sus datos personales, formando un conjunto de derechos personales que merecen nuestro respeto y preocupación.